HÍGADO: UN ÓRGANO PERFECTO, SI SABEMOS CÓMO CUIDARLO.

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Es uno de los órganos más importantes del cuerpo y es el encargado de purificar la sangre, convertir los alimentos en energía y producir bilis para ayudar a desdoblar las grasas en el intestino.

Es el centro de la química corporal y regulador, entre otras funciones, de la cantidad de sangre en el organismo.

Es un sistema perfecto, pero puede ser muy vulnerable a los malos hábitos de vida y la ingesta de sustancias tóxicas, medicamentos y alcohol.  La cirrosis, las hepatitis o el hígado graso, son los problemas más comunes.

El consumo excesivo de grasas le genera una sobre exigencia, lo que puede desencadenar en una inflamación o la obstrucción de los canales biliares, por eso recomienda una alimentación sana, con buen consumo de frutas y agua, y evitar las bebidas alcohólicas.

Para evitar las enfermedades antes citadas es importante la prevención con una alimentación sana, evitando el sobrepeso y el sedentarismo.  

Incluso emociones como la ira o irritabilidad y la frustración, también, contribuyen afectar su función.

Con solo tomar la decisión de llevar una dieta sana, con frutas y verduras y quitando casi por completo alimentos industrializados, se desintoxicará en pocos días.